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Higiene de la bandeja nacedora para un comienzo limpio

12 October 2012

La importancia de una buena higiene fue explicada por Gerd de Lange, de Pas Reform, quien ofreció además consejos sobre su apropiada limpieza y desinfección.

El estado de higiene del ambiente en el que se incuban los pollitos tiene un impacto directo sobre la calidad del pollito de un día de edad y la mortalidad durante la primera semana.

El primer ambiente que encuentran los pollitos es la bandeja nacedora y sus contenidos. Las bandejas nacedoras se utilizan intensamente, a menudo dos veces a la semana. Por ello mantenerlas escrupulosamente limpias entre los ciclos resultará en buenos dividendos.

Los cascarones de huevo débiles, combinados con la rotura debido al manejo tosco durante la transferencia, pueden manchar las plumas a los pollitos, los cuales a menudo se eliminan para evitar las quejas de los clientes.

Los huevos que explotan debido a la contaminación exponen a los pollitos recién nacidos a un alto desafío bacteriano. En condiciones de incubación sub-óptimas, los pollitos que nacen sin que su ombligo esté totalmente cerrado son más vulnerables, pues esto constituye un punto de entrada para los patógenos que a la larga van a derivar en un aumento de la mortalidad en la primera semana debido a infección del saco vitelino.

Los huevos se deben trasferir a las bandejas nacedoras apropiadamente limpias y desinfectadas. La suciedad que permanece después de un ciclo de nacimiento anterior, tal como meconio (las deyecciones verdosas producidas por los pollitos), pedazos de cascarón, pelusa, sangre y contenidos del huevo, se deben retirar completamente antes de desinfectar.

Las bandejas nacedoras se lavan mejor directamente después de la remoción de los pollitos y los residuos de la incubación. Lavar las bandejas manualmente con un cepillo para frotar, o semi-manualmente con una lavadora de alta presión, puede dar resultados que equivalen al lavado en una lavadora automática diseñada para este propósito, pero requieren gran cantidad de mano de obra.

En los sistemas automatizados de lavado más sofisticados, un módulo de apilamiento y desapilamiento establece un tiempo de pre-remojo, para una limpieza más completa y fácil.

Medidas a tomar

Otras medidas para optimizar la limpieza y la desinfección son:

  • Temperatura: el agua de lavado no debe exceder los 50 a 60 °C, para evitar la coagulación de las proteínas. Como mínimo, 40° C proporcionará resultados de limpieza adecuados.
  • Detergente: utilice un detergente alcalino que no forme espuma (con o sin hipoclorito) en la concentración recomendada, y alterne ocasionalmente con un detergente ácido para evitar la acumulación de sarro.
  • Efecto mecánico: Mantenga la presión y dirección del agua de lavado, por ejemplo, revise la calidad de las boquillas y el ajuste apropiado. La presión más alta produce mejores resultados.
  • Tiempo: La velocidad con la cual pasan las bandejas nacedoras a través de la lavadora; el tránsito más lento produce mejores resultados de limpieza.
  • Enjuague perfectamente con agua limpia.
  • Después de lavar, realice la desinfección usando un desinfectante de amplio espectro.

Una bandeja nacedora fabricada para incluir un agente microbiológico en el polímero con el cual se elabora proporciona una protección continúa entre los ciclos de limpieza.

Si el proceso de lavado proporciona buenos resultados de limpieza, no se obtiene un beneficio al utilizar papel en las bandejas, a menos que el lote incluya muchos huevos que exploten. En este caso, el papel absorberá alguna parte de la suciedad y hay más probabilidad de que los pollitos se mantengan limpios.

Se recomienda el uso de papel con alta absorbencia y suficiente agarre para evitar que los pollitos se 'despatarren'. El periódico no es adecuado. Si se utiliza papel, verifique que no impida el flujo de aire sobre los huevos y los pollitos salidos del cascarón asegurándose de que se ajuste bien dentro de la base de la bandeja y esté totalmente cubierto con huevos para mantenerlo abajo.

Consejos

  • Limpie y desinfecte las bandejas nacedoras completamente después de cada uso.
  • Evalúe los resultados de la limpieza regularmente mediante una inspección visual y establezca la acción correctiva cuando sea necesaria.
  • Supervise el efecto de la desinfección a través de muestras o placas Rodac.
  • Permita que las bandejas se sequen totalmente antes de la siguiente transferencia; considere un juego adicional de bandejas si esto no se puede lograr.
  • Considere cuidadosamente si debe usar papel en las bandejas nacedoras: el uso incorrecto tendrá un efecto negativo sobre el flujo de aire y podría afectar la capacidad de incubación y la calidad de los pollitos.
Octubre 2012

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