El sector avícola de Centroamérica y el Caribe: diversos retos

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El sector avícola de Centroamérica y el Caribe: diversos retos

12 June 2014

El Dr. Alberto Ramírez, presidente de la Federación de Avicultores de Centroamérica y el Caribe analiza al sector avícola de la región, a través de las preguntas de Chris Wright, editor principal de El Sitio Avícola. Todo en el marco del XXIII Congreso Centroamericano y del Caribe de Avicultura, que tomará lugar en La Habana, Cuba del 18 al 20 de junio de 2014.

Dr. Alberto Ramírez, presidente de Fedavicac

1. Como presidente de Fedavicac, Federación de Avicultores de Centroamérica y el Caribe, ¿cómo evalúa el nivel de cooperación entre los diferentes países?

Dr. Alberto Ramírez: “El sector cada año se viene enfrentando a disímiles situaciones y contingencias, un denominador común son las consecuencias que genera la actual crisis mundial y derivado de esta, los precios de las materias primas que se sabe son en muchos momentos manipulados. No obstante, la producción avícola en la región podemos considerarla de estable”.

“Hay mucha intención entre los actores a nivel regional por generar mayor cooperación, sobre todo, en la definición de normas y estándares a instancias aduaneras, requisitos técnicos, etc., que validan sobre la transparencia en el comercio sobre todo, pero a mi modo de ver falta mayor compromiso y voluntad para acometer esa cooperación que se precisa y hablar en términos de avances y mayor desarrollo”.

“Experiencias, profesionales, instituciones y demás, los poseemos. Pienso que debemos interactuar más con los servicios oficiales en cada uno de nuestros Gobiernos, para ser más escuchados y escuchar nosotros como sector privado los requerimientos y metas que se proyectan y que involucran al sector, en todo este mecanismo ha estado faltando siempre sensibilidad y mayor comunicación”.

2. ¿Cuáles son los temas más importantes para el sector avícola en Centroamérica y el Caribe?

Dr. Alberto Ramírez: “Insertados en una región como la de América Latina, que logra aportar alrededor de un 40% de productos avícolas de lo que se produce y comercializa a nivel mundial, podríamos aseverar que el sector enfrenta disímiles problemáticas, también como una consecuencia de ese constante crecimiento y desarrollo”.

“Hoy son diversos los retos a los que el sector se enfrenta, podríamos hablar de cuestiones técnicas que ocupan la agenda mayoritaria del quehacer".

"Por ejemplo, se está prestando mucha atención a los temas que hacen la inocuidad de los alimentos, dado el conocimiento que se va adquiriendo y, por ende, una mayor exigencia por parte de los consumidores, que va de la mano con la alta estandarización y la trazabilidad, al desafío mundial desatado por las enfermedades transfronterizas y a los efectos del cambio climático y su relación con las enfermedades aviares; se conoce que dos enfermedades tan devastadoras para la avicultura como la ENC y la IAAP están en estrecha relación con los efectos del cambio climático, y se está brindando de igual manera una mayor atención al bienestar animal, muy interrelacionado con el elevado desarrollo tecnológico que precisa la actividad”.

“Una constante común la constituye la elevación de los costos de los alimentos para las aves, en una región mayoritariamente importadora de esos rubros, y con el compromiso de brindar productos avícolas para una población que continúa creciendo. Los costos de las materias primas son cada vez más elevados, no tanto por los índices de lo que se produce, sino debido a la especulación que se genera en los mercados y el uso inadecuado en los biocombustibles”.

“Se nos están imponiendo exigencias superiores en el ámbito ambiental, cuando no ha sido el sector nuestro uno de los mayores agresores al medio ambiente, los Tratados Comerciales que se han aplicados en la región hoy y que han dejado a los avicultores a merced de la competencia desleal, unido a los graves efectos que se genera mediante la concentración de la producción en pocos países y todo esto, de la mano de deficientes políticas y estrategias a nivel de Gobiernos para acompañar a una actividad como la nuestra, muy estratégica y con elevado compromiso con la seguridad alimentaria, pero tan sensible”.

3. ¿Existen buenas relaciones entre las asociaciones avícolas de cada país y sus respectivos Gobiernos? A nivel regional, ¿se le hace caso a la perspectiva de los avicultores?

Dr. Alberto Ramírez: “La región a pesar de toda su problemática económica, política y social; destaca por la voluntad de los Gobiernos para facilitar el movimiento de productos avícolas, pero con una limitante que, en mi opinión particular, interfiere demasiado y es la situación sanitaria tan diferente en cada uno de los países”.

“Soy del criterio que las medidas sanitarias deben basarse en principios científicos y armonizarse en normas, directrices o recomendaciones de carácter internacional, sin discriminaciones entre sus miembros y en condiciones idénticas o similares”.

“Y se está dando una situación hoy que repercute no solo en los países del área, sino que es casi de carácter global y resulta en el proceso de reducción de los Estados que han ido dejando las estructuras responsables de la salud animal- de cuya prestación ellos son responsables- en una situación inquietante en cuanto a calidad de sus servicios y a la cantidad de profesionales”.

“Hay también otra situación que se da, y es la ineficacia en la cooperación técnica de los países desarrollados a países menos desarrollados (mayoría en la región de Centroamérica y el Caribe) donde sabemos que aún hay grandes abismos por superar, pues no se percibe ningún esfuerzo serio y consistente para apoyar este campo vital para el comercio”.

“Finalmente pienso, que hará falta mucha voluntad y transparencia de todos los actores (Gobierno, sector avícola) para fortalecer las relaciones, donde estar bien informados será premisa para poder actuar con eficiencia e insertarse en cada corriente de comercio que surja, y de esta manera enfrentar los desafíos que impone el vivir en un mundo globalizado, donde es cada vez más evidente la paradoja y la diferencia entre las fuerzas de poder”.

4. ¿Existen buenas relaciones entre los sectores avícolas de los diferentes países de Centroamérica y el Caribe? ¿Hay mucho comercio avícola entre los países de la región?

Dr. Alberto Ramírez: “Las importaciones y exportaciones de productos avícolas entre los países del área se dan principalmente con huevos y carne de aves, que se intercambian de acuerdo con la demanda, la época del año y la fluctuación de los precios, las que han mantenido un ritmo ascendente. Existe otro mercado no menos importante que se corresponde con los huevos fértiles y las pollitas y pollitos de un día, que se importan en muchos casos fuera de la región, principalmente desde los EUA y de Francia por citar los mayores aportadores”.

“Referente a las importaciones, el producto que mayormente distingue esta operación es la carne de pollo y en alguna época del año se suma la carne de pavo. Por dicha y como una fortaleza del sector, nuestros productos siguen y seguirán siendo por un largo tiempo las proteínas más baratas y accesibles de cuantas se producen hoy”.

“El comercio pudiera resultar más dinámico, si se llegaran a superar las disímiles brechas que existen hoy a través de los Gobiernos y de los mecanismos de integración regional, que por falta de voluntad sobre todo, no alcanzan su mayor impacto. Tales condiciones conspiran contra el clima de confianza necesario para impulsar las negociaciones, pero que precisamente se les da adecuado seguimiento, en aras de tratar que la comunicación sea lo más clara posible y lograr entendimientos entre las partes”.

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